Preguntas frecuentes
¿Qué es un opioide?
Un opioide es un tipo de droga que se encuentra en algunos analgésicos recetados, como también en ciertas «drogas callejeras» como la heroína. Los opioides recetados pueden ayudar a controlar el dolor siempre que se consuman de acuerdo con las indicaciones de un médico. El uso incorrecto de opioides puede causar adicción y provocar efectos adversos, e incluso la muerte.
Los opioides son químicos naturales o sintéticos que disminuyen la sensación de dolor. Entre los opioides recetados más comunes, se encuentran los siguientes:
- Hidrocodona (Vicodin®)
- Oxicodona (OxyContin®)
- Oximorfona (Opana®)
- Codeína
- Morfina
- Metadona
- Fentanilo
¿Son necesarios los opioides?
Los medicamentos con opioides son solo una de las muchas opciones que existen para tratar el dolor. Antes de decidir si es necesario tomar medicamentos con opioides, puede ser útil que analices qué tipo de dolor estás sintiendo.
Dolor intenso: es un tipo de dolor que usualmente comienza de repente y cuya causa se reconoce; puede ser, por ejemplo, el dolor que se siente por una herida o una cirugía. El dolor disminuirá con normalidad en la medida en que tu cuerpo sane.
Dolor crónico: es un tipo de dolor que dura 3 meses o más, y la causa puede ser una enfermedad, una afección, una herida, un tratamiento médico, una inflamación, o incluso una razón desconocida.
Los opioides recetados pueden usarse para tratar el dolor intenso grave, pero no se ha comprobado que sean igual de efectivos para su uso a largo plazo en el tratamiento del dolor crónico. Si te han recetado opioides, lo mejor es que intentes aliviar el dolor con la dosis más baja posible y la menor frecuencia posible. Los opioides solo deben usarse cuando son necesarios y durante el tiempo necesario. Para el dolor intenso, dicho periodo suele ser de 3 días como máximo; no es común que se necesiten por más de 7 días.
Antes de tomar medicamentos con opioides para el dolor crónico, asegúrate de lo siguiente:
- Analiza las opciones de tratamiento del dolor con tu médico, incluso las que no incluyen fármacos recetados.
- Cuéntale a tu médico sobre tu historia clínica y sobre cualquier antecedente de consumo indebido de sustancias o de adicción a las drogas o al alcohol, ya sea propio o de alguien de tu familia.
- Hablen sobre todos los riesgos y los beneficios del consumo de opioides recetados.
Hablar con sinceridad con tu profesional de la salud te ayudará a asegurarte de que recibirás atención segura, efectiva y adaptada a ti. Una buena idea es que pidas una cita de seguimiento con tu médico para que reevalúe tu dolor, y para que te brinde orientación sobre algunos síntomas de abstinencia que puedes experimentar al finalizar el tratamiento si has estado consumiendo opioides durante más de un par de días.
¿Desarrollaré una adicción a los opioides?
Cualquier persona que consuma opioides, ya sean recetados o no, puede volverse adicta a ellos. También es posible desarrollar tolerancia; esto significa que, con el tiempo, pueden necesitarse dosis más altas del fármaco para sentir el efecto de alivio del dolor. Lo riesgoso de la tolerancia es que el consumo de dosis más altas implica la exposición al riesgo de una sobredosis potencialmente letal. Algunas personas desarrollan también dependencia física; es decir, presentan síntomas de abstinencia cuando se suspende el medicamento.
Cuéntale a tu médico sobre tu historia clínica, en especial si tú o alguien de tu familia tienen antecedentes de consumo indebido de sustancias o de adicción a las drogas o al alcohol. También es importante destacar que no debes consumir opioides en grandes cantidades o con más frecuencia de la que te recetaron.
¿En qué consiste el TAM?
El TAM es una forma de abordar los trastornos de consumo de sustancias, como el Trastorno por Consumo de Opioides (TCO), desde un enfoque integral; es decir, tomando al paciente como una totalidad. Para ello se combina el uso de medicamentos con consejería y terapias conductuales. Las investigaciones demuestran que la combinación del TAM con terapias conductuales es un método exitoso para tratar el TCO.
¿Qué involucra el proceso del TAM?
Los componentes de los servicios del TAM pueden incluir, entre otros, los siguientes:
- Diagnóstico inicial
- Planificación del tratamiento
- Medicamentos
- Consejería
¿Es necesaria la consejería dentro de los servicios del TAM?
La consejería es una parte importante del tratamiento y, por lo general, se requiere que los pacientes accedan a ella conjuntamente con todos los medicamentos del TAM.
En algunos lugares donde se ofrece el tratamiento, un paciente debe recibir al menos 50 minutos de consejería con un terapeuta o consejero. En otros lugares, la consejería no es obligatoria, pero sí muy recomendable.
¿Dónde pueden brindarse los servicios del TAM?
Se puede acceder a los servicios del TAM en varios lugares y a través de una gran red de médicos y establecimientos, entre los que se incluyen muchos médicos de atención primaria. Encuentra un proveedor del tratamiento cerca de ti.
¿Qué medicamentos se suelen utilizar en el TAM?
Los medicamentos aprobados por la FDA que se utilizan en el TAM para el tratamiento del TCO son, entre otros, los siguientes:
- Buprenorfina o productos con buprenorfina
- Metadona
- Naltrexona
Para obtener más información, consulta la sección Medicamentos recetados en el TAM.
¿Mi plan de seguro médico cubre el TAM?
Medi– Cal, Medicare y muchos seguros privados cubren el TAM. Para obtener más información, consulta con un proveedor de TAM autorizado.
¿Qué es un estimulante?
Los estimulantes son drogas. Hay estimulantes ilegales, y otros que se venden habitualmente bajo receta y actúan sobre el sistema nervioso central mejorando el estado de alerta, la atención, y la energía, con efectos positivos sobre el estado de ánimo y la excitación. El consumo excesivo y sin recomendación médica de drogas estimulantes puede ser peligroso, e incluso mortal.
¿Cuáles son los estimulantes más comunes?
Los estimulantes más comunes son los siguientes:
- Cocaína
- Anfetaminas
- Metanfetaminas
- Khat
- Éxtasis (MDMA)
¿Qué implica un tratamiento para el Trastorno por Consumo de Estimulantes?
Entre los métodos conocidos, hay cuatro que se consideran los más efectivos.
- Manejo de Contingencias (MC)
- Intervención Motivacional (IM)
- Programa de Reforzamiento Comunitario (PRC)
- Terapia Cognitivo-Conductual (TCC)
¿Dónde se ofrecen servicios de tratamiento para el Trastorno por Consumo de Estimulantes?
Existen diversas instituciones que ofrecen tratamiento para el Trastorno por Consumo de Estimulantes, a los que se puede acceder a través de una gran red de centros de tratamiento y médicos, incluidos médicos de atención primaria. Busca un proveedor de tratamiento cerca de ti.